Lo que está sucediendo en Japón es un acontecimiento muy duro. Japón consiguió permanecer en pie ante el terremoto de casi 9 grados en la escala de Richter (el máximo son 10) pero no pudo mantenerse ante las olas de unos 10 metros de altura que produjo el tsunami. Ahora ante tal desastre se suma el riesgo de las fugas radiactivas de las centrales nucleares.
En esta imagen se puede ver la cantidad de energía que fue liberada y propagada por todo el océano.
Un abrazo a todos y ánimo.